Instalar la aerotermia se está convirtiendo en una opción popular y sostenible para la climatización de viviendas. Este sistema, que utiliza energía renovable, ofrece tanto calefacción como refrigeración, además de agua caliente sanitaria (ACS), convirtiéndolo en una solución todo en uno para las necesidades de climatización del hogar.
La aerotermia funciona mediante una bomba de calor que extrae energía térmica del aire exterior y la transfiere al interior de la vivienda. Este proceso es altamente eficiente, ya que las bombas de calor aerotérmicas utilizan un 75% de energía renovable y solo un 25% de energía eléctrica. Además, debido a su eficiencia energética, la aerotermia puede reducir significativamente las emisiones de CO2 y el gasto en la factura de la luz, ofreciendo hasta un 77% de ahorro en comparación con la calefacción eléctrica tradicional.
Uno de los factores a considerar al instalar la aerotermia es el costo inicial. La inversión depende del tipo de equipo y de las necesidades de la vivienda. Por ejemplo, un sistema que proporcione calefacción y ACS puede costar entre 7.000€ y 24.000€, mientras que un aerotermo solo para agua caliente puede oscilar entre 1.900 y 3.000 euros. En una vivienda de unos 120 metros cuadrados, el coste aproximado sería de unos 7.700 euros, incluyendo la instalación. A pesar de la inversión inicial, el sistema se amortiza con el tiempo debido a los ahorros en la factura de energía.
Otro aspecto importante es el espacio necesario para el sistema, especialmente para el compresor exterior. Además, se recomienda que las viviendas tengan suelo radiante para maximizar la eficiencia de la calefacción, aunque esto puede implicar un costo adicional en las obras de la casa.
Entre las ventajas de instalar la aerotermia se destacan su eficiencia energética, la reducción de emisiones de CO2, la seguridad (al no haber combustión), su funcionamiento silencioso, y el mínimo mantenimiento requerido. Sin embargo, también presenta desventajas como el alto costo inicial y un rendimiento menor en condiciones de temperaturas extremas.
En conclusión, instalar la aerotermia es una inversión de futuro que ofrece beneficios significativos en términos de eficiencia energética, ahorro económico y sostenibilidad ambiental, siendo una alternativa atractiva a los sistemas de climatización tradicionales.