La importancia de una buena iluminación en la oficina
Disfrutar de una buena iluminación en la oficina es uno de los aspectos más importantes para desempeñar el trabajo de una manera más eficaz. Una buena iluminación en la oficina genera además un mejor ambiente de trabajo, por lo que facilita las relaciones con los compañeros.
No siempre la mejor iluminación es la más intensa
Un espacio correctamente iluminado no es necesariamente el que más luz posee, ya que un exceso de iluminación puede resultar muy molesto. Tampoco ocurre siempre que una oficina con iluminación natural es mejor que aquella que lo esté con iluminación artificial.
Una buena iluminación en la oficina debería contar con una potente fuente de iluminación natural, que no sea molesta para ninguno de los usuarios de la oficina, y que no produzca cambios bruscos de luz, como por ejemplo los reflejos en la pantalla del ordenador o sobre la mesa de trabajo.
Además de la iluminación natural, es necesario contar con una fuente de iluminación artificial que sea neutra, es decir, que no sea perjudicial. El problema más asociado a una iluminación inadecuada es el sobreesfuerzo de la vista, que se traduce en dolor de cabeza, fatiga, estrés, etc. Otro inconveniente de no contar con una buena iluminación en la oficina es una mala postura laboral, que a largo plazo puede provocar problemas de espalda o lesiones musculoesqueléticas.
Paredes y techos con colores claros o tonos pastel
Otro modo de potenciar una buena iluminación en la oficina es pintar las paredes y techos con colores claros o en tonos pastel, pues dan mayor sensación de amplitud. Los colores más intensos generan más estrés, y la oficina es un lugar en el que pasamos muchas horas al día y ya de por sí es estresante, no conviene aumentar las posibilidades de padecer esta dolencia por el color de las paredes.
Climalcor
La importancia de una buena iluminación en la oficina