Como hemos comentado en otras ocasiones, las bombillas LED se han impuesto frente a otras formas de iluminación, además desde las instituciones se está favoreciendo su inclusión en las viviendas a través de campañas y aprobación de normativas que penalizan otros tipos de iluminación.
Pero como pasa con otros tipos de iluminación, sabemos cómo elegir la bombilla LED adecuada para cada necesidad, ¿qué debemos tener en cuenta?
La potencia lumínica
La potencia lumínica establece la cantidad de luz que puede generar una bombilla LED. Se mide en lúmenes, el problema es que los fabricantes no unifican criterios y no todos indican el mismo número de lúmenes que produce un LED.
Para conocer en número de lúmenes que genera una bombilla LED podemos utilizar la siguiente fórmula:
Lúmenes reales = nº vatios x 70.
Existen muchas tablas de equivalencia que relacionan la potencia lumínica entre los diferentes tipos de bombillas, son bastante útiles.
El ángulo de apertura de la luz
No todas las bombillas LED ofrecen el mismo ángulo de apertura. Esto obliga a mirar bien las especificaciones y los usos recomendado por el fabricante. Si el ángulo de apertura es de 40º, se tratará de una bombilla útil para una luz muy focalizada, si el ángulo es más amplio, deberemos utilizarla para iluminar espacios más amplios.
La temperatura de color
La temperatura de la bombilla LED ofrece diferentes colores de iluminación, hay varios colores según ese factor: blanco cálido, blanco puro o blanco frío. Cada uno de ellos genera una luz con un color diferente. Si la bombilla LED está entorno a los 3000K será blanco cálido, 4500K blanco puro y 5800K blanco frío.
La instalación
Cambiar la iluminación general de la vivienda para colocar bombillas tipo LED no siempre es tarea sencilla, es importante revisar la instalación e informarse sobre qué elementos de la instalación pueden ser reutilizados y cuáles es mejor sustituir.
Climalcor
Cómo elegir la bombilla LED para cada necesidad